En nuestro reciente viaje por Andalucía probamos por primera vez el Salmorejo, un popular y delicioso plato de esta región de España, originario de la ciudad de Córdoba.
El Salmorejo es una especie de crema fría de tomates que se sirve generalmente como primer plato. Su consistencia es cremosa y suave debido a la utilización de miga de pan como uno de sus ingredientes, lo que la hace perfecta para utilizar como salsa para untar, para acompañar otros alimentos o simplemente para disfrutar a cucharadas.
Nos gustó tanto la primera vez que lo probamos que tuvimos que confirmar su delicioso sabor en cada una de las ciudades a las que fuimos; Cádiz, Vejer de la Frontera, Tarifa, Granada, Córdoba y Sevilla. Los más ricos que probamos fueron en la Tapería del Califa (Vejer de la Frontera) y en la Taberna Montanilla en Córdoba.
Es por esto que apenas volvimos decidí preparar su versión típica siguiendo la receta original. La receta la encontramos escrita, literalmente, en una calle de córdoba llamada “la calleja del salmorejo cordobés”, que fue renombrada el año 2014 para darle reconocimiento y difusión a este popular plato.
La primera vez que la preparé me quedo un poco salado para mi gusto, es por eso que decidí hacer ese pequeño cambio a la receta original. Por lo demás es una exacta réplica de la receta original, con algunas recomendaciones adicionales y explicada como siempre con fotografías paso a paso para que no quede ninguna duda de como preparar este increíble plato.
Ingredientes (4 porciones)
- 1 kg de tomates maduros
- 200 grs de pan
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- 1 diente de ajo
- 5 grs de sal (1 cucharadita)
Paso a paso
- Lavar bien los tomates y cortarlos en trozos irregulares. Ponerlos en la licuadora y triturar.
- Con la ayuda de un colador, colar la mezcla para quitar los residuos (piel y pepitas).
- Añadir los 200 grs de pan (sin cortezas) a la mezcla de tomate ya colada, y dejar reposar 10 minutos para que el pan se ablande.
- Añadir 100 ml de aceite de oliva virgen extra, 1 cucharadita de sal y 1 diente de ajo pelado (puedes sacar la parte del centro para evitar que repita). Mezclar todo muy bien en la licuadora. Probar para confirmar que no le falta sal.
- Dejar la preparación en el refrigerador por al menos 1 hora para que se enfríe.
- Servir y decorar con huevo duro molido y trocitos de jamón ibérico (Yo use jamón serrano para decorar ya que no tenía jamón ibérico en ese momento, es una buena alternativa aunque con ibérico queda aún más sabroso.)
Los invito a animarse y preparar esta sabrosa receta, no se arrepentirán 😉
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